martes, 6 de abril de 2010

Avatar, Hollywood y Evo


El otro día tuve la oportunidad de ver Avatar, una película nominada a no recuerdo a cuántos óscares, no importa el dato, pero existe una constante cuando Hollywood hace marketing con esta mierda de las nominaciones, y al parecer les da buenos resultados.

Consejo: a más nominaciones, peor película, hazme caso.

Con respecto a Avatar, leí artículos de diferentes índoles, desde los comentarios de diversos sectores de la Iglesia católica ( que evidentemente no tienen nada que hacer mas que ver las pelis de James Cameron) criticando el apego del público a profesar la “nueva ideología” ecologista, como neo tótem del siglo XXl en desmedro de la religión de Jesus.
Hasta las declaraciones de Evo Morales quien comentó que, pese a tener una "alta dosis de fantasía", la película es "una profunda muestra de la resistencia al capitalismo y la lucha por la defensa por la naturaleza". Con el pequeño detalle de resistencia al Ktal que la peli costó unos  400 millones de dólares.

La revolución democrático y cultural en su máxima expresión

Bueno pero vamos al grano, La Película:

Una versión regurgitada, siendo muy generosos, de una versión histórica del coloniaje para ser digeridas por las masas incultas e ignorantes del buen cine.
Me imagino que habrá sido del gusto de nuestro Canciller, ya que él es adepto a interpretar las diferencias sexuales de las piedras a través de la lectura de las arrugas de los abuelos en la “consmovision” aimara.

La trama no deja de ser muy elemental, unos “Nativos” buenos y azules con formas muy extrañas y lisérgicas de hombres gatos extremadamente ambientalistas, algo tan cercano a los de Greepeace quienes son capaces de matar a un ser humano por dañar a una mosca en defensa de la ecología.
Humanoides que viven alrededor de un árbol sagrado, una versión pueril del árbol de la sabiduría de las “sagradas escrituras”, todo un collage para la populachería. Donde existe mucho color, mucha animación, donde se mezclan alegorías religiosas como la antes mencionada, así como la infaltable receta del amor, esta vez exacerbada hasta el extremo en un AMOR entre especies distintas (perverso!!!) entre la mujer gato azul Neytiri, la nativa, y Jake Sully, el marinerito lisiado supuestamente luego de haber combatido en Venezuela

Todo este cambalache exaltado en los, hay que reconocerlo, excelentes efectos especiales ha sido del agrado de las masas.

Con respecto a los otros, los hombres malos (nuestra especie) que intenta hacerse con la tierra de los nativos por una cuestión parecida a la plata del Potosí en la época de la colonia, mineral muy cotizado denominado unobtainium. Es que las fuerzas militares convertidas en una monstruosa corporación privada, nada mas acertado en James Cameron, lo único bueno de la peli, intentan colonizar a los azulitos.

  Evo exhortando a mundo seguir el ejemplo de los Navi 
(los avatarianos) en la pre cumbre climática de Cochabamba


 
En rasgos generales de eso se trata la película más cara de la historia. Una mierda más de Hollywood para regocijo de los estúpidos que consumen este tipo de mercancías. Sin embargo, siendo críticos debemos reconocer que nunca superará a las Guerra de las Galaxias, donde los efectos para la época son maravillosos, costó mucho menos y los guiones son especialmente trabajados.